La seguridad en Internet está amenazada por todo tipo de malware, el robo de datos o la invasión a la privacidad. La era de la movilidad, la domótica, el coche inteligente o la Internet de las Cosas, han aumentado enormemente los dispositivos conectados, la manera de alojar información y el modo de acceder a servicios y aplicaciones en línea de todo tipo con las que conectamos a diario centenares de millones de usuarios, aumentando los riesgos de seguridad para consumidores y empresas.